La asamblea de trabajadores de la Fábrica de Armas de A coruña ha acordado apostar por la continuidad de la factoría. Tras reunirse con los directivos de Hércules de Armamento, la concesionaria de la gestión de las instalaciones, los representantes sindicales aseguran que han recibido garantías de estabilidad en el empleo y de pago de nóminas a corto plazo. El Ministerio de Defensa ha suspendido temporalmente la actividad de fabricación de armamento en la factoría. Una decisión que toma después de que la fábrica se quedara sin el servicio de vigilancia debido a impagos por parte de la adjudicataria.

 Defensa ha prohibido a Hércules de Armamento de forma temporal la producción de armas al no cumplirse las condiciones de seguridad para producir y almacenar este tipo de material. Para los sindicatos con representación en la fábrica estamos ante un problema entre empresas que debe solventarse en breve. Consideran que tienen garantías de futuro suficiente para seguir trabajando en un proyecto que ven factible.

Xavier Riobóo de la CIG

La asamblea ha acordado censurar la actitud de extrabajadores que pretenden, dicen, torpedear el funcionamiento de la concesión. Aseguran que en la actualidad hay 155 empleados en la fábrica con contratos indefinidos, unos de 8 horas y otros de media jornada. Dicen que han tenido retrasos en el pago de nóminas pero consideran que serán subsanables. Trabajan en la fabricación de armamento, de prótesis y de material de automoción. Es la Policía Nacional quien desarrolla por el momento las labores de seguridad en Santa Bárbara.

Esta mañana Gas natural Fenosa ha cortado el fluído eléctrico de la factoría. El personal de Defensa que estaba en la fábrica, comisión inspectora, han abandonado las instalaciones porque no hay luz.