Seguimos pendientes de Oza Cesuras, ese municipio artificial, fruto de la fusión impulsada por el PP para sustentar su idea de que los ayuntamientos deben ahorrar compartiendo gastos y estructuras. Una idea tan interesante que llevaría de forma natural a que se desarrollaran las comarcas, con centros administrativos y servicios comunes, en lugar de buscar uniones a la fuerza. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha dictado una providencia en la que señala que la ley gallega de Administración Local, la ley que afecta a la aprobación de la fusión de Oza y Cesuras, podría ser inconstitucional. Porque pide que haya un apoyo de dos tercios para una eventual fusión y en este caso hubo sólo mayoría absoluta de las corporaciones. Deja para después decidir si la fusión fue o no legal tras la denuncia del PSOE. Lo cierto es que diga lo que diga la ley la fusión se presentó como la gran solución para la organización territorial de Galicia y se quedó en una anécdota que no se ha vuelto a repetir. Los dos ayuntamientos juntos no tienen suficiente masa crítica y la población no estaba convencida de la idea que se aprobó en medio de un gran despliegue de propaganda. Se presentó como una iniciativa estrella del PP para esta legislatura. Ni hubo más trabajo en común ni búsqueda de un modelo, que lo hay, más ajustado al territorio ¡Hasta Dositeo Rodríguez hablaba de comarcas! 

El Conselleiro Alfonso Rueda afirmaba que la de Oza Cesuras no sería la única fusión municipal de la legislatura.