Los exdirectivos de las cajas gallegas condenados a dos años de cárcel por sus indemnizaciones millonarias no irán probablemente a prisión. Hemos conocido la primera de las sentencias sobre denuncias relacionadas con las antiguas Caixa Galicia y Caixanova y su fusión, que es ejemplarizante en el titular, pero con pocos efectos prácticos. Por el momento los acusados surfearán sobre sus recursos y ni tendrán que devolver a corto plazo la cuantía de sus indemnizaciones, conseguidas, según la sentencia, con engaños cuando las entidades ya estaban quebradas por su nefasta gestión, unos 20 millones de euros. Así se escribe la historia cuando hablamos de delincuentes, ya no presuntos, de guante blanco. La Audiencia Nacional tiene más investigaciones abiertas sobre la gestión de las cajas, que eran de todos pero algunos utilizaron como su rancho particular, sobre todo de operaciones inmobiliarias que las llevaron a la quiebra y pueden afectar a alguno de los que aún no están. Tras esta sentencia el señor de la caja del sur, Gayoso, resulta afectado, pero el del norte, José Luís Méndez, sigue intocable. Detrás de sus decisiones está la desaparición de los referentes financieros de Galicia. Y parte del tremendo agujero que llevó al rescate bancario, a los recortes, al paro, a la emigración y al dolor. Se debe entender entonces el interés por que se busquen responsables que paguen por lo ocurrido.

Salida a bolsa de Astroc uno de los procesos que investiga la Audiencia Nacional. Caixa Galicia tuvo un protagonismo fundamental en el apoyo financiero a esta empresa protagonista de la burbuja inmobiliaria. En el minuto 2.58 del vídeo, su Presidente, Enrique Bañuelos, menciona a la entidad financiera depositaria de buena parte de los ahorros de los gallegos. Junto al Banco Sabadell. El Sabadell es un banco pero Caixa Galicia era una Caja de ahorros.