Buscar
domingo, 19 de mayo de 2024 00:02h.

Miembro del equipo de programación del CGAI, además de participar cada sábado en el A Vivir A Coruña, colabora en el proyecto audiovisual Galicia Ano Cero y en la revista Luzes.

EL JUGADOR / DESCUBRIENDO ENIGMA

THE GAMBLER / EL JUGADOR 
THE IMITATION GAME / DESCUBRIENDO ENIGMA

THE GAMBLER / EL JUGADOR 

La historia de un profesor de literatura adicto al juego y con tendencias autodestructivas aparece ahora como nueva versión de un filme de 1974 bastante menos conocido o visto de lo que se ha comentado con motivo de este estreno. También titulada The Gambler / El jugador, dirigida entonces por el británico Karel Reisz –montador, teórico y cineasta, uno de los padres del Free Cinema británico-, su primer filme en Estados Unidos (luego vendría la poderosa Who’ll stop the rain? / Nieve que quema, sobre la novela Dog Soldiers del recientemente fallecido Robert Stone), interpretado por un James Caan de inteligente contención, nos ofrecía un viaje a los demonios interiores del protagonista, un ser atormentado propio del Dostoievski de la novela homónima, previo traslado de la Europa Central. Reisz, con la figura de culto (a su vez jugador) James Toback como guionista, presentaba un relato formalmente muy bien construido, retrato personal y urbano que enlazaba con parte del thriller más singular del momento, era de auténtica opulencia, con una soberbia, electrizante banda sonora de Jerry Fielding sobre una sinfonía de Gustav Mahler.  

En esta nueva versión, que no ha funcionado nada bien en nuestro país, dirigida por el también británico Rupert Wyatt (El origen del planeta de los simios), así como reaparecen temas y filias, llegan otros nuevos. Con sus desaliños y excesos, la película resulta francamente muy atractiva. A Mark Wahlberg Michael Kenneth Williams, Jessica Lange y al gran John Goodman les favorecen sus papeles, los productores 40 años después son los mismos (dos clásicos, Winkler y Chartoff, con títulos como A quemarropa, la saga Rocky o Toro salvaje como currículum compartido) y la película desarrolla un cuento moral con ráfagas de fascinación. La historia de un niño bien, profesor de literatura en la universidad, escritor talentoso pero no genial, obsesionado por un lema que bien pudiera ser “victoria o muerte”, descendiente de millonarios y endeudado por el juego con un par de mafiosos poco recomendables, da lugar a un filme existencial, filosófico, verborreico, plagado de matices y situaciones propias del policiaco, con unos cuantos personajes extremos, desorientados, rapaces o compulsivos, próximos a lo memorable y toda la carga propia de cierta idiosincrasia estadounidense, allí donde derrota y triunfo aparecen como destinos de un itinerario incierto y temerario. Muy recomendable para amantes del desasosiego, de los matices, del mundo que jamás es unívoco.            

 

THE IMITATION GAME / DESCUBRIENDO ENIGMA

Llegan los títulos de la carrera hacia el Oscar. Una producción de los hermanos Weinstein nominada a 8 premios –algunos de los principales: película, director, actor o guión (adaptado)- y dirigida por el noruego Morten Tyldum, The Imitation Game, ha sido de las primeras en llegar. Filme biográfico sobre el matemático Alan Turing, clave en descifrar el célebre código Enigma, con el que la Alemania nazi cifraba sus mensajes durante la 2ª Guerra Mundial, la película gira en torno a tres tiempos históricos distintos: años 50, con Turing en peligro por su homosexualidad; el periodo clave de la guerra, con su contratación por el gobierno británico junto a un equipo de analistas de misivas con los que construye una famosa máquina (precedente del ordenador y otras formas de inteligencia artificial) y la lucha contra el enemigo alemán; finales de los años 20, una adolescencia colegial marcada por un trágico suceso donde funde el descubrimiento de su condición sexual con la iniciación a la criptografía.

Historia de un genio caído en desgracia (Turing se suicida en 1954), de los acosos de la intolerancia, del progreso y la ciencia frente a la barbarie, destaca la exhibición de su protagonista, el omnipresente británico Benedict Cumberbatch, de Sherlock Holmes moderno y televisivo a Julian Assange, uno de los actores de moda en los últimos años y, sobre todo, un intérprete que nunca decepciona, alguien que hace crecer propuesta narrativa y entorno. Para la ocasión, como biopic de interpretaciones, aparece bien acompañado por Keira Knightley (nominada al Oscar como secundaria por su papel de Joan Clarke, una de las pocas mujeres de esta cruzada), Matthew Goode, Mark Strong y la figura de los 80 Charles Dance.  

La película es clásica, sobria y convencional, no encuentra el equilibrio entre las diversas partes, le falta coraje para ir más lejos, si bien facilita un retrato de un personaje tan oculto como Turing al tiempo que renuncia con astucia a la parafernalia bélica, centrándose en los trabajos de este equipo de criptógrafos en un apartado pueblo británico, un grupo que posiblemente llegó a evitar alrededor de 14 millones de muertos más en la guerra.