Comienzan en A Coruña los juicios de la veintena de empresarios gallegos que invirtieron en Novagalicia Banco para intentar recuperar los 70 millones de euros depositados en la entidad que surgió tras la fusión de las antiguas cajas. Los propietarios de empresas como Hijos de Rivera, Copasa, Gadisa, Hierros Añón o Coren han denunciado a la antigua dirección de Novagalicia y al FROB por dar luz verde a la Operación Acordeón que redujo a cero el capital de la entidad financiera gallega justo antes del rescate europeo, lo que llevó a que perdieran toda su inversión.

Los empresarios señalan que fueron invitados a invertir en el banco como entidad saneada y viable y que la valoración de NCG con la que contaban en ese momento no reflejaba su patrimonio real. La entidad financiera duda de que, por el perfil inversor de los empresarios, desconociesen la situación de NCG. Iñaki Rivera, de Hijos de Rivera, señalaba a comienzos de año que pretendían apoyar el mantenimiento de una entidad financiera gallega.

Iñaki Rivera

A partir de mañana comenzarán las comparecencias con el juicio, en el juzgado de primera instancia número 5 de Hijos de Rivera, Copasa, Inversiones Subel, de Luís Somoza, antiguo propietario de Azkar; Inversiones Gallegas del Cable, Inversiones Río Breiro, Jealsa, y Coren contra el FROB y Novagalicia.

El segundo juicio se celebra el jueves y el viernes con la denuncia de Inveravante, Metalships, Renebé 2003, Santiago Rey Fernández-Latorre y José Luis Mariño.

El juicio de la demanda de Hierros Añón -que reclama 25 millones de participación en NCG se celebrará en el Juzgado de primera instancia número 2 el 11 y 12 de diciembre. La inversión de los empresarios gallegos se produjo en enero de 2012.