La privatización de Novagalicia Banco (NCG)se realizó de forma acelerada en diciembre de 2013 porque una consultora internacional, la consultora McKinsey, advirtió al organismo estatal que en 2015 su valor se desplomaría. La entidad fue vendida con adelanto sobre el calendario previsto por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) por apenas mil millones de euros a Banesco. En su primer año de operaciones Banesco ganó más dinero de lo que le costó Abanca cuando aún no ha entregado la totalidad de lo comprometido, concretamente Abanca ha obtenido 1.157 millones de beneficios.

El informe erróneo es la explicación dada por el gobierno a la Diputada socialista Laura Seara, que presentó una iniciativa para conocer las causas de la venta de una entidad a todas luces rentables. Para la CIG en Abanca el argumento del informe es una excusa. Más bien, a juicio de su portavoz Clodomiro Montero, el gobierno buscó el informe que más convenía a sus planes.

La diputada socialista recuerda que el de McKinsey es el segundo informe erróneo sobre la entidad que sigue siendo líder en Galicia. El primero lo redactó a principios de 2010 KPMG a iniciativa de la Xunta que consideraba viable una fusión de Caixa Galicia y Caixanova.