Hoy se cumplen dos años de la muerte de Elisa Abruñedo, la vecina de Cabanas que apareció apuñalada y con signos de haber sido agredida sexualmente en una pista forestal cercana a su casa. Su familia denuncia la falta de avances en la investigación policial y reclama que el caso no caiga en el olvido. Convoca junto al Ayuntamiento una concentración a las siete de la tarde en la playa de Cabanas.

La familia cree que la policía ha dado carpetazo a la investigación porque no tiene ningún indicio sobre el posible culpable. Exige que se de un nuevo impulso a las pesquisas.

Raúl Fernández, cuñado de Elisa Abruñedo 

Elisa Abruñedo, de 46 años, salió a pasear el l de septiembre de 2013, como era habitual en ella cada tarde, por los alrededores de su casa en la parroquia de Lavandeira.Al día siguiente, su cuerpo fue localizado por un vecino.