En la semana en la que ha sido declarada Reserva Mundial de la Biosfera las cuencas de los ríos Mero y Mandeo, con ecosistemas costeros y de montaña, el presidente da Rede Galega de Desenvolvemento Rural y del Consorcio das Mariñas, José Antonio Santiso Miramoentes, ha señalado que esta declaración es el punto de partida a nivel mundial como ejemplo de buena relación entre el ser humano y la naturaleza. 

La zona cubre alrededor de 116.000 hectáreas y comprende 18 ayuntamientos donde viven 190.000 habitantes. Una densidad de población con una notable actividad industrial, pero respetuosa con la naturaleza que hacen atípica la designación de la Unesco y convierte esta nueva reserva un ejemplo para el resto.

Santiso ha señalado también que la zona ya cuenta con una planificación hasta el año 2022 y permitirá optar a nuevas vías de financiación, potenciar el turismo y establecer una marca propia para productos autóctonos.