Asociaciones protectoras de animales reclaman al Ayuntamiento que inspeccione la perrera municipal y haga un seguimiento de la actividad que realiza la concesionaria, la empresa Servigal. Exigen también la publicación del pliego de condiciones del concurso de adjudicación de las instalaciones,porque no se conoce, y la actualización de la ordenanza de animales, apropada hace ya 17 años. Reivindicaciones que portavoces de estas asociaciones han expresado en El Coruñés Opina en el mismo día en el que 400 personas con sus perros, según los organizadores, un centenar según la policía local, se han manifestado desde el Obelisco hasta la Plaza de María Pita. Los promotores de esta protesta aseguran haber recogido 30 mil firmas en demanda de "una perrera digna".

75 de cada cien perros y 95 de cada cien gatos que entran en la perrera son sacrificados, según la Asociación APADÁN. Datos que no se han podido contrastar con la concesionaria.  Apadán, Gatocán y el Colegio de Veterinarios de A Coruña instan a la Concejalía de Medio Ambiente a promover campañas de adopción y a velar por la reducción "escandalosa" de eutanasias que se hacen en la perrera de Bens. Piden más control en las instalaciones, en lugar de lanzar, dicen,"solo campañas contra las cacas de los perros con afán exclusivamente recaudatorio".

Uno de los veterinarios que trabaja para Servigal, en llamada al programa, ha calificado de falsas las denuncias, asegurando que las instalaciones están limpias y los animales, en buenas condiciones. En contra de lo manifestado por las protectoras, este empleado dice que "no se aplica ninguna eutanasia injustificada" aunque no ha sabido precisar el porcentaje de sacrificios en la perrera.

El beneficio neto de Servigal en A Coruña asciende a 11 mil euros, según la propia compañía. Anuncia una querella contra Rubén Pérez, coordinador de la Agrupación Animalista Libera.