El principal imputado en la Operación Zeta, el empresario Gerardo Crespo, ha asegurado hoy en una entrevista en Radio Coruña Cadena SER que hacía pagos mensuales de 3.000 euros a Pachi Lucas para que le consiguiese contratos con la Administración pública. Afirma que escogió a esta persona, considerado como el conseguidor de la trama, por ser el mejor amigo del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que también tuvo como amigo a Marcial Dorado, condenado después por narcotráfico.

Añade que el propio Feijóo le habría deseado a Pachi Lucas y a Crespo que ganasen mucho dinero. El supuesto cabecilla de la trama considera que la jueza debe llamar a declarar a Pachi Lucas, así como a otras muchas personas, que no ha nombrado. Crespo niega haber comprado a cargos de la Xunta, pero prefiere no aclarar si realizó pagos al PP. Advierte que sí hablará ante la jueza.

Admite pagos en efectivo, en sobres, a autónomos, pero niega que hubiese una caja B en su empresa. Sí admite que había una caja a la que sus empleados llamaban la KGB.

Afirma que él, su familia y su abogado han recibido amenazas de voces que no ha identificado.