Los trabajadores de Alcoa han celebrado que su fábrica no se cierra reuniéndose, a media mañana, en una asamblea convocada por los sindicatos. Es la recompensa a una lucha y un balón de oxígeno, eso sí temporal, según el comité de empresa.

Juan Carlos Corbacho, vicepresidente

 La multinacional norteamericana anunciaba ayer por la tarde que la subasta eléctrica ha sido satisfactoria para sus intereses, lo que permitirá mantener abiertas las instalaciones de A Grela y de Avilés, por lo menos un año más. 

Alcoa, en un comunicado, afirma que retirará el procedimiento de despido colectivo, una vez que se confirmen oficialmente los resultados de la subasta. Aún está pendiente la validación por parte de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia. Los trabajadores insisten en que la clave está en la regulación del sistema energético. Una medida que daría estabilidad, subrayan, al sector. Juan Carlos Corbacho. 

La empresa reclama un marco energético a largo plazo, ya que la interrumpiblidad obtenida solo servirá para un periodo de 12 meses. Y añade que las dos plantas continúan con dificultades y son más vulnerables a la volatilidad de las condiciones de mercado.