La Junta de personal del Complejo Hospitalario de A Coruña ha denunciado un nuevo colapso en las urgencias en coincidencia con el puente del uno de noviembre. La falta de espacio y el retraso en los ingresos ha llevado a la gerencia del centro a abrir camas en plantas cerradas en el Abente y Lago, concretamente 12 y los servicios han estado desbordados. Los sindicatos critican que no se haya empleado más espacio disponible en ese centro sanitario.

María Seijo, su presidenta

Denuncian que durante buena parte de la mañana hay 41 pacientes en observación pendientes de cama. Durante el fin de semanas ha llegado a haber 60 en camillas, 20 de ellos en pasillos. Ha habido pacientes en urgencias con ingresos programados.

Es el caso de Manuela Álvarez Guitián. Llegaba ayer al hospital con un ingreso programado para neurología. Le explicaron que debía ingresar desde urgencias. Allí llegaba a las diez de la mañana y le colocaban una vía sin darle una explicación sobre su situación. Durante todo el día no consiguió hablar más que con enfermeras que se encontraban, dice, desbordadas. A las ocho abandonaba el hospital bajo amenazas de que en realidad se estaba fugando.

Manuela Álvarez Guitián

Ha presentado una queja al servicio de Atención al paciente y pretende presentar otra en la Gerencia para que ofrezca una explicación y se programe su ingreso por los cauces habituales.

Fuentes del hospital señalan que en el Abente y Lago se han abierto las camas que eran necesarias. Atribuyen a un caso puntual lo que ha ocurrido con la mujer trasladada a urgencias cuando tenía un ingreso programado.