El Ministerio de Defensa ha suspendido temporalmente la actividad en la Fábrica de Armas. Una decisión que toma después de que la factoría se quedara sin el servicio de vigilancia debido a impagos por parte de la concesionaria, Hércules de Armamento. Está previsto que hoy la empresa comunique a los trabajadores sus planes de futuro.

Defensa ha prohibido a Hércules de Armamento de forma temporal la producción de armas al no cumplirse las condiciones de seguridad para producir y almacenar este tipo de material. Los impagos a la empresa de vigilancia, Segur Ibérica, ascienden a medio millón de euros. Es la Policía Nacional quien desarrolla por el momento las labores preventivas. Un exempleado de la factoría que se ha trasladado a la zona. Quince trabajadores con contratos fijos están directamente afectados por la situación.