Cerca de cuatrocientas personas han reclamado en Cabanas que se esclarezca el crimen de Elisa Abruñedo, la mujer que fue hallada muerta, con signos de violencia, después de haber salido a pasear. En la tarde de ayer los vecinos de la localidad han llevado a cabo una concentración en el pabellón polideportivo de Lavandeira para reclamar que se siga investigando el caso.
El cuñado de Elisa Abruñedo, José Raúl Fernández, ha criticado que parte del equipo que se hacía carego del caso ha tenido que investigar la muerte de la niña Asunta. Cree que la investigación de su cuñada ha quedado parada. 
 
José Raúl Fernández

El alcalde de Cabanas, Germán Castrillón, asegura que el caso ha generado intranquilidad entre los vecinos. 
 
Germán Castrillón

Elisa Abruñedo, de 46 años, fue hallada muerta en una zona de bosque a unos 500 metros de su casa, en la parroquia de Lavandeira. Presentaba signos de violencia, heridas de arma blanca y estaba semidesnuda.