El capitán del Deportivo compareció esta mañana en la sala de prensa tras al segunda jornada de trabajo de la plantilla. Feliz luego de prolongar su vida deportiva una campaña más, una decisión en la que Víctor Sánchez jugó un papel clave. El lateral recordó que con la llegada de su excompañero de vestuario al banquillo su rol en el equipo cambió, pasando del ostracismo absoluto a entrar en las convocatorias e incluso en el once inicial. "Me encuentro bien, deseaba seguir y quería comprobar si las otras partes pensaban que pudiera cumplir los requisitos. Todos me han dado su confianza"

El veterano defensa, que cumplirá 40 años el próximo enero, valoró de manera muy positiva la llegada de jugadores del perfil de Arribas o Fernando Navarro. "Son buenos, han rendido, tienen experiencia. El año pasado sufrimos mucho atrás y debemos mejorar en eso. Jugadores así han competido siempre bien y nos pueden ayudar". Manuel Pablo también constató el cambio producido en el perfil de los jugadores que busca la dirección deportiva: en principio se busca más a jugadores en propiedad en lugar de cedidos, aunque el canario quiso recordar que jugadores como Oriol Riera actuaron en préstamo la pasada campaña sin que eso afectase a su rendimiento: "es más un problema de la actitud personal".

También se refirió a la posible salida de su paisano Fabricio. Manuel Pablo no se imagina al Deportivo empezando la temporada sin él bajo palos aunque "aun queda un mes. Las posturas para que renueve ahora parecen alejadas pero pueden encontrarse a lo largo del año". Bromeó también sobre sus conversaciones con otro paisano, Valerón, que volverá a la Primera División la próxima temporada y con el que espera encontrarse en los terrenos de juego "no nos retiramos hasta que no se retire el otro¡. El Flaco se merece estar en Primera por todo lo que ha dado. Habrá pique" declaró en tono jocoso.