Luis Alberto se reencontrará este domingo con su pasado reciente. La temporada pasada vistió la camiseta del Málaga en una etapa que empezó bien para él y que acabó siendo una campaña para olvidar. Disputó 15 partidos, hizo dos goles y luego de empezar como titular en 5 de los 6 primeros partidos de Liga, acabó condenado al ostracismo en la segunda mitad de competición. Pese a eso, el gaditano no guarda malos recuerdos de la afición malacitana, confiando en un recibimiento bueno "ya que siempre me trató bien. Espero un recibimiento como a cualquier otro". Su empatía con la afición local le lleva a reconocer que no celebrará un gol en caso de anotar este sábado "me trataron muy bien y creo que no debo celebrar el gol. Hay que tener respeto y ellos siempre me lo tuvieron a mí".

El atacante será así protagonista en La Rosaleda luego de haberlo sido de manera indirecta en Riazor el domingo ante el Athletic. No solo por sus dos disparos a los postes, sino porque el primer gol de los vascos llega con él tendido sobre el césped y con sus compañeros pidiendo que se parase el encuentro. Luis Alberto analiza la jugada insistiendo en la falta que recibe por parte de Raúl García aunque reconoce "debí levantarme rápido porque el equipo juega con 10. Es falta pero si no la pita tengo que ayudar al equipo a defender"