El Deportivo soñó durante 39 minutos con llevarse algún punto de la visita al Bernabéu. Al término del partido, el sueño se tornó en pesadilla, llevándose una manita y completando un encuentro que no tuvo historia durante la segunda mitad. Los coruñeses demostraron ser un equipo carente de la contundencia necesaria para presentarse en un escenario como el feudo merengue. Un tierno rival para equipos con instinto asesino.

Todo eso pese a que Oltra introdujo cambios en el once inicial. El técnico quiso ensayar un once con más solidez en la tarea defensiva, dejando en el banco a Valerón y Aythami y dando la alternativa a Zé Castro y Álex Bergantiños, debutando ambos como titulares en esta temporada. El de la Sagrada Familia se encargó del trabajo sucio en el medio campo junto con Abel Aguilar. A Juan Domínguez se le encomendó labor de construcción y salida de balón, un encargo en el que el canterano se vio superado.

Los coruñeses salieron a tener el balón. Durante los diez primeros minutos parecieron encontrarse cómodos sobre el césped del Coliseo blanco. Al cuarto de hora los blanquiazules tejieron su mejor jugada. Riki se plantó ante Casillas batiendo al internacional con un suave toque de puntera. Los coruñeses se encontraban con un 0-1 casi sin pretenderlo. Pero el encuentro empezó a cambiar de cariz a partir de ese tanto. Los meregues se estiraron buscando la meta de Aranzubía y comenzaron a hurgar en la herida del flanco derecho del Depor. Por allí se dejaban caer Di María y Cristiano Ronaldo poniendo en serios aprietos a un Manuel Pablo superado por ambos. En una de las galopadas, el capitán cometío penalti sobre el extremo argentino y sirvió en bandeja un empate que transformó CR7 desde los 11 metros. La alegría le había durado al Dépor siete minutos, pero el castigo no se quedó ahí. Los madridistas percutieron en la grieta de la banda derecha blanquiazul, asistiendo Modric a Di María para situar el 2-1 en el marcador. Sólo habían transcurrido 20 minutos desde el gol de Riki y los de Oltra ya marchaban por debajo en el marcador, mientras intentaban no caer a la lona definitivamente. Pizzi y Bruno Gama se movían en la indefinición sin encontrar la manera de atacar pero tampoco ayudaban a cerrar líneas. Juan Domínguez no encontraba su sitio mientras Alex Bergantiños se multiplicaba persiguiendo rivales. Antes del descanso apareció de nuevo Cristiano Ronaldo para hacer el 3-1 que significaba todo un mazazo para los deportivistas.

En la segunda parte Oltra retiró a Manuel Pablo y Riki, ambos con problemas físicos, dando entrada a Laure y Nélson Oliveira. Nada cambió el panorama. La segunda mitad fue un mero trámite, una agonía para un Deportivo que apenas pisaba el área de Casillas. Los de Oltra tenían más posesión de balón pero solo como medio de evitar más daño en la portería propia. Ni así. A balón parado Pepe situó el 4-1 en una jugada en la que se aprovechó de la pasividad de la retaguardia coruñesa. La cuenta la cerró Cristiano Ronaldo, de nuevo desde el punto de penalti, tras una jugada en la que Evaldo toca un balón con la mano dentro del área.

El Depor suma seis puntos, y baja a la 15ª posición, con dos puntos sobre el descenso. La próxima jornada afronta la visita a Vallecas  previa a la llegada del Barcelona a Riazor.