El Dépor sufre una auténtica "pandemia" de lesionados. Como si se tratase de fichas de dominó que van cayendo, los inquilinos de la enfermería blanquiazul son cada día más. Uno tras otro. Esta semana tenía el aliciente de ver el regreso de Bruno Gama. Uno de los jugadores que más ilusiones había despertado entre el deportivismo. Sin embargo, en la vuelta al trabajo del equipo coruñés, la noticia fue la recaída del futbolista luso. Bruno Gama estará al menos 4 semanas más en el dique seco. El centrocampista no se recuperó, por tanto, de la rotura parcial del tendón del adductor medio de su cadera derecha. Una lesión que se le produjo en el Torneo Teresa Herrera frente al Sevilla, hace exactamente un mes. El Deportivo informó a través de su página web que "para intentar conseguir una cicatriz más resistente y evitar así la necesidad de una intervención quirúrgica, se va a iniciar un tratamiento con ondas de choque y plasma rico en factores de crecimiento". Es decir, que no se descarta que tenga que ser operado. "En cuatro semanas, el futbolista será sometido a un nuevo examen médico para evaluar la eficacia del tratamiento conservador aplicado", sentencia el comunicado del club.