Aranzubía sostiene al líder
El portero salvó a un Depor superado en el juego por el Córdoba pero letal en el área. La ventaja sobre el Celta se amplía a 7 puntos. Juan Domínguez forzó la quinta amarilla y no jugará en Girona.
25 de marzo de 2012 (01:00 h.)
Oltra sabía que el Córdoba saldría a por el partido colocando la línea de presión al borde del área coruñesa pero no supo contrarrestar la propuesta andaluza. Los primeros veinte minutos de juego el Deportivo cayó una y otra vez en la tela de araña tejida por Paco Jémez en su regreso a Riazor. La zaga local ofreció un recital de pases fallidos y acabó abusando del balón en largo. El centro del campo, desbordado, no pudo nunca con el trabajo de los cordobeses. Valerón, Juan Domínguez y Borja jugaron a cámara lenta y Bruno Gama y Guardado lo pagaron persiguiendo sombras.
Sólo los errores de cara a puerta y un gran Aranzubía permitieron llegar al Depor con vida al ecuador del primer acto. Y entonces se dio una rareza que acabó en gol. Aythami buscó en largo a Borja, que apareció en el punto de penalti, hizo falta en el salto al portero rival y empujó a la red el balón rechazado por el meta. El gol fue un palo para los visitantes, que siguieron dominando pero no volvieron a pisar el área con peligro. Tampoco lo haría un Depor que llegó al descanso asfixiado.
El guión no cambió en la segunda mitad, aunque el Depor salió más intenso. Un par de escaramuzas blanquiazules en los primeros minutos pudieron ampliar la ventaja local, ambas en saques de esquina. En la primera, Xisco no remató en buenas condiciones un balón que sacó la defensa bajo palos; en la segunda, fue Valerón el que obligó a la zaga cordobesa a despejar sobre la línea de gol. En las dos ocasiones brilló Guardado, inspiradísimo en la estrategia, y falló el Córdoba, un flan en las jugadas por alto.
Con los de Paco Jémez cada vez más volcados llegó otro milagro de Aranzubía, que sacó un mano a mano a Fede Vico para preservar la ventaja del líder. En una contra, Bruno Gama pudo hacer el segundo pero no vio a Xisco, solo, y estrelló el balón contra un defensa. El siguiente ataque local mató el partido. Guardado, todo fe, forzó una falta en banda derecha que él mismo se encargó de servir en bandeja para que Aythami marcase a placer en el área pequeña.
Hasta el final, el protagonismo sería para los pivotes coruñeses del Depor. Álex Bergantiños tuvo un par de buenas ocasiones para sellar la goleada, pero demostró que lo suyo no es el gol. Juan Domínguez, desaparecido, forzó una amarilla a falta de 10 minutos y cumplirá un partido de suspensión en Girona la semana que viene.
Sólo los errores de cara a puerta y un gran Aranzubía permitieron llegar al Depor con vida al ecuador del primer acto. Y entonces se dio una rareza que acabó en gol. Aythami buscó en largo a Borja, que apareció en el punto de penalti, hizo falta en el salto al portero rival y empujó a la red el balón rechazado por el meta. El gol fue un palo para los visitantes, que siguieron dominando pero no volvieron a pisar el área con peligro. Tampoco lo haría un Depor que llegó al descanso asfixiado.
El guión no cambió en la segunda mitad, aunque el Depor salió más intenso. Un par de escaramuzas blanquiazules en los primeros minutos pudieron ampliar la ventaja local, ambas en saques de esquina. En la primera, Xisco no remató en buenas condiciones un balón que sacó la defensa bajo palos; en la segunda, fue Valerón el que obligó a la zaga cordobesa a despejar sobre la línea de gol. En las dos ocasiones brilló Guardado, inspiradísimo en la estrategia, y falló el Córdoba, un flan en las jugadas por alto.
Con los de Paco Jémez cada vez más volcados llegó otro milagro de Aranzubía, que sacó un mano a mano a Fede Vico para preservar la ventaja del líder. En una contra, Bruno Gama pudo hacer el segundo pero no vio a Xisco, solo, y estrelló el balón contra un defensa. El siguiente ataque local mató el partido. Guardado, todo fe, forzó una falta en banda derecha que él mismo se encargó de servir en bandeja para que Aythami marcase a placer en el área pequeña.
Hasta el final, el protagonismo sería para los pivotes coruñeses del Depor. Álex Bergantiños tuvo un par de buenas ocasiones para sellar la goleada, pero demostró que lo suyo no es el gol. Juan Domínguez, desaparecido, forzó una amarilla a falta de 10 minutos y cumplirá un partido de suspensión en Girona la semana que viene.